Liderando con propósito: insights y perspectivas de Aaron Hurst sobre el futuro de los negocios

Entrevista originalmente publicada en uschamberfoundation.org

En el mundo de hoy, el liderazgo impulsado por el propósito y el impacto social son más importantes que nunca. Aaron Hurst, emprendedor social galardonado y autor del libro The Purpose Economy, ha dedicado su carrera a fomentar cambios positivos en la sociedad. En 2001, fundó la Fundación Taproot, clave en la creación de un mercado de servicios pro bono de 15 mil millones de dólares en EE.UU. y con iniciativas en más de 30 países. Su libro predijo que el propósito sería una fuerza central en el crecimiento económico y la innovación.

Describes la Economía del Propósito como la cuarta gran era económica. ¿Podrías explicar un poco más qué significa esto? ¿Cómo pueden los líderes empresariales aprovechar eficazmente el propósito para impulsar tanto el crecimiento económico como el impacto social en esta nueva era?

En diferentes etapas del desarrollo económico, la fuente principal de creación de valor y riqueza ha cambiado. Nuestra primera era económica fue la Economía Agraria, en la cual poseer tierras era fundamental. En la segunda era, la Economía Industrial, los recursos naturales se convirtieron en el motor de la creación de riqueza (como el combustible, los metales, entre otros).

La Economía del Propósito es la era en la que la capacidad de crear significado para las personas impulsa la innovación y genera valor. Con colaboradores más empoderados que nunca y consumidores que al tener que elegir entre productos globales similares, valoran más aquellos que aportan sentido a sus vidas.

Los líderes de las organizaciones deben comprender las necesidades psicológicas de sus equipos y clientes, y diseñar entornos laborales, productos y servicios que satisfagan dichas necesidades, incrementando así su inteligencia emocional (EQ).

En tiempos de desafíos sociales complejos, ¿cómo se recomienda que los líderes sostengan y amplifiquen el propósito de su organización? 

La clave es incorporar el propósito en todos los sistemas: objetivos, mensajes y acciones. Si el propósito y los valores no pueden ser operativos, deberían redefinirse para asegurar su integración. Esto, junto con el respaldo del liderazgo y la junta directiva, facilitará su sostenibilidad en los altibajos.

En esencia, la Economía del Propósito gira en torno a la conexión, que es lo más importante cuando se trata de generar significado.

La conexión social en la sociedad está en rápido declive: 26 millones de estadounidenses no tienen ni un solo buen amigo. No confiamos unos en otros. El servicio está decayendo. Nuestra falta de conexión nos está matando literalmente y está desintegrando a la sociedad. Si las organizaciones quieren seguir siendo relevantes y maximizar su impacto, esta es el área en la que probablemente puedan tener el mayor impacto en este momento.

En la Economía del Propósito, necesitamos que la conexión sea un indicador clave de desempeño (KPI) líder para cada organización. 

En una encuesta reciente de LinkedIn , el 88% de los encuestados afirmó que el propósito aumenta las ganancias, pero no todos lo creen. ¿Cómo pueden las empresas garantizar que su búsqueda del propósito no comprometa la rentabilidad, sino que la respalde?  

¿Cómo puede una empresa vivir de acuerdo con sus valores y no comprometer su rentabilidad? Esta pregunta no se escucha muy a menudo y, sin embargo, es básicamente la misma. El propósito no es una causa que nos aleja de nuestro negocio principal. Es la razón por la que existe la empresa. Es la razón por la que su trabajo es importante. ¿Por qué debería tener que comprometer sus ganancias por eso? Es lo que alinea a la empresa e impulsa la productividad, la motivación y la lealtad del cliente. 

Incluso si se adopta una perspectiva tradicional y se considera que el propósito es simplemente una causa o una cuestión de «dar algo a cambio», las investigaciones demuestran que el éxito financiero sostenido se logra mediante el servicio a otras personas. Si necesita profundizar más, consulte el clásico de Adam Grant, Give & Take. 

Al reflexionar sobre su trayectoria como emprendedor social, ¿cuáles son algunas de las lecciones más importantes que ha aprendido sobre el poder del propósito? ¿Cómo han influido estas lecciones en su enfoque sobre el liderazgo y la innovación? 

Encontramos significado en las relaciones, el impacto y el crecimiento. La clave como líder e innovador es incorporar esas tres cosas en todo. 

Esta es mi receta: encontrar una oportunidad crítica para generar un impacto en la sociedad. Crear una visión convincente que inspire a las personas y que puedan compartir. Definir los pasos iniciales necesarios para que las personas tengan la esperanza de que la visión más amplia es posible. Involucrar a las personas en la creación de la historia utilizando su tiempo, talento y experiencia para hacer posible lo que otros piensan que es imposible. Crear una comunidad de personas que sean parte de la construcción y celebrar todo. Por último, convertir el aprendizaje en un objetivo explícito que esté a la altura de los ingresos.